lunedì 26 maggio 2014

The Downward Spiral o Un tranquilo sábado de mala hostia.

Estoy en un barco que salió a las 8:00 desde Göteborg (Suecia) y me llevará a Frederikshavn en Dinamarca. Son las 8:51, ya estamos demasiado fuera como para ver algo que no sea agua y un poco de cuesta a lo lejos, la llegada está prevista a las 11:15 y es un buen momento para escribir.
El sábado pasado (bueno de hecho hace dos sábados) me fui, como todos los sábados, a trabajar en el bosque comestible de Can Masdeu. Un grupo de unas 15-20 personas del Centre Civil del Coll la Bruguera había venido a visitar el proyecto. Habían contactado conmigo dos meses antes. Llegué un poco tarde y ellxs ya estaban allí, junto con D.F. y R.T.
D.F. le explicó lo que es Can Masdeu y justo después pasé a explicarle lo que son la permacultura, Permacultura Barcelona y un bosque comestible. Después pasamos a visitar el bosque, mientras D.F. y R.T. trabajaban un poco.
Al final de la visita la gente se dijo entusiasta, pero después de poco se fue.
El día anterior (viernes) me había ido a Amposta (1,45h en tren), había enseñado 3 clases de una hora y media del Curso de Diseño en Permacultura y había vuelto por la noche del mismo día para enseñarle el bosque comestible a la gente del Coll la Bruguera la mañana siguiente. Como ya dije, a las 11:15 del sábado estaba en Can Masdeu y a la 1:30 quedábamos D.F., R.T. y yo. Nadie más. El día era muy bonito, despejado, hacía calor, pero no como en la ciudad, pero no había nadie más que nosotros. Estaba deprimido y decidí no quedarme a comer. Bajando pasé como siempre al lado de los campos de fútbol sala y como siempre me dio de pensar. Vi docenas de tíos vestidos de colores, sudando bajo el sol y divirtiéndose. Pues sí, es un juego y está bien vestirse de colores, no es cierto la vida “normal” cuando no está tan bien ir vestidos con colores alegres. Además en el fútbol es importante distinguirse los unos de los otros. ¡Que se entiendan bien los equipos contrapuestos! Y luego, claro, en el día a día no que no está bien ir de colores. Es de maricón, ¡collons! Además en el fútbol sólo tíos, claro. Faltaría más. La separación de los sexos antes que todo, por dios. Será un juego, pero ¿quien quiere jugar con mujeres? ¡Ellas sirven para otras cosas! Además no sería justo. ¡La diferencia entre nosotros y ellas es demasiada!
En fin. Estaba de malo humor, cansado, y pensamientos negativos me llenaban la cabeza. Está bien divertirse como mejor queramos, pero la sociedad nos dirige, como siempre, y nos dejamos dirigir. Pensar en lo que nos gusta de verdad podría ser dañino.
Seguí caminando hacia el metro. Antes de entrar me hice llamar (por segunda vez) por E.N. que me dijo que estaba en Sants con C.C. en un concierto-fiesta para el centro social de Can Víes y que me esperaba. Empecé a sentirme mejor, a pensar que no me lo tenía que tomar tan personalmente. Que las personas del Coll la Bruguera eran casi todas mayores y que había sido bueno pasar la mañana con ellxs. Y que al final la gente del fútbol sala se estaba solo divirtiendo como mejor sabía. Llegó el metro, entré, cogí el metro y llegué leyendo hasta Diagonal donde cambié a la línea azul. Cogí el metro y me arrepentí de haberme ido de Can Masdeu. Me arrepentí con todo mi ser.
Eran las 14 y el metro estaba lleno. Había colores del Barça por todo lado. 
Tuve que estar de pie. 


Un grupo de tíos hacía coros, saltaba y reía en el metro. Ha-cí-a cooo-ros, sal-ta-baaa y re-ííí-aaaaa MUCHO. Al poco tiempo los coros pro-Barça se transformaron en coros anti-Madrid. Cualquier equipo de Madrid fuera. Y los coros eran violentos, claro. Y los tíos se reían, claro. Una tía que estaba a mi lado le explicaba a otro tío —¡justificándose!— que no, no le gustaba el fútbol pero que a su padre (que estaba allí al lado) le encantaba. Y el padre se puso a cantar con los del Barça y a darle fuertes golpes ritmados al palo al que estaba apoyado yo también. Y su anillo de boda “sonaba” al tocar el palo. Después de un par de paradas entró en mi coche un segurata ENORME que había visto mientras esperaba el metro en Diagonal. Nunca estuve más feliz de ver a un representante del orden. Al entrar, el hombre dijo algo a los tíos, pero se veía que no era serio, que tenía la sonrisa en la boca. Los tíos le abrazaron y siguieron haciendo coros, saltando y riendo. Su divisa naranja se transformó en mis ojos en otra blaugrana. Empezaron a contestar a los coros tíos del coche de al lado, en la parada siguiente entraron más tíos y se unieron a los coros. La parada siguiente era, por fin, mi parada. Me parecía haber estado en el metro un tiempo infinito. Al dirigirme a la salida, la que estaba más lejos de los tíos que seguían “cantando”, vi que había muchas otras personas con la divisa oficial. Y gente normal, tías mayores, que reía y parecía estárselo pasando bien, o por lo meno comprender todo esto, verlo como algo al fin y al cabo necesario.

Salí. Por fin salí. Me fui corriendo a buscar a E.N. Estaba en una plaza con C.C. y L.. La fiesta se estaba acabando y un tío tocaba el banyo, las percusiones y cantaba (gritaba) con toda la intensidad posible. E.N. explicó que era vasco. Claro. Conté mi historia. Después de poco C.C. se fue. E.N vio que yo estaba muy afectado. Me cuidó. Me dijo —como ya había hecho en otras ocasiones— que era la necesidad de sentirse parte de un grupo, que ella tampoco estaba de acuerdo con lo de los tíos del metro, pero que al fin y al cabo los tíos que jugaban a fútbol cerca de Can Masdeu estaban haciendo deporte y se lo estaban pasando bien. Todo se me quedaba corto. Mi furor no se iba. E.N. se dijo de acuerdo conmigo, no sé si totalmente en serio o también para placarme.
Decían que la religión es el opio del pueblo y es cierto. Pero nosotrxs hemos evolucionado, hemos abandonado la espiritualidad. Ya no la necesitamos. Y tampoco necesitamos hacer guerras (bueno, por lo menos entre nosotrxs, que allá donde se lo pasan mal y donde podemos ganar fácil sí que nos vamos). Ahora nuestro opio es mucho más material. Nuestra felicidad o tristeza, ya no dependen de hombres con divisa de cura, supuestos emisarios de un ser superior que nos dicen lo que está bien o no hacer. Ahora se deben a tíos con camisetas coloreadas que se afrontan cada dos por tres para satisfacer nuestras necesidades drogadictas y nuestra sed de “sangre”, nuestra necesidad de sacar la violencia toda masculina que nos llevamos por dentro. Y el poder ya no necesita ensuciarse las manos con agua bendita y hostias (en sentido literal y figurado). Ya es suficiente tener dinero para comprar este o aquel futbolista, mantenernos interesadxs y seguir haciendo lo que le da la gana. Panem et circenses decían los romanos. Las cosas no han cambiado mucho desde entonces.

Si 1/100 de la energía invertida en los partidos (de fútbol) se invirtiera en algo que tiene sentido viviríamos en un mundo mucho mejor.

sabato 28 dicembre 2013

¿Condicionamiento masculino?

Durante los últimos meses he vivido en un mundo de hombres. Después de unos primeros días donde había un porcentaje muy bajo de mujeres, llegó un periodo de masculinidad absoluta. 5 hombres antes, después 3 o 2 tíos durante mucho tiempo. Cuando eramos 5 B.B. repetía que estar tanto tiempo sólo con hombres era una situación muy difícil de repetirse y si, esto puede ser un experimento sociológico interesante durante un tiempito.
Durante este periodo pasé mucho rato charlando e intercambiando opiniones con los otros chicos, sobre todo con L.B.. Nuestras discusiones siempre rotaban alrededor de temas como relaciones interpersonales, discriminaciones (de género, más que todo), sexualidad. Nuestras posiciones sobre estos conceptos son bien diferentes entre ellas y las charlas subieron de intensidad desde el primer intercambio de opiniones el verano pasado, hasta un largo viaje de coche hace pocos días. 
¿Qué es cultural y qué es natural? ¿Tenemos que confiar en la evolución (cultural) y aceptar también lo que no nos gusta como las discriminaciones o las injusticias? ¿Solo porque, de faltar estas, no se seguiría el curso natural de las cosas y podrían pasar cosas aún peores?
Yo —por ejemplo— no creo que la discriminación de las mujeres sea un hecho natural, sino más bien cultural. ¿Es algo que existe desde hace muchísimo tiempo? Esto no quiere decir que tengamos que aceptarla. No. No tenemos que aceptar ni esto ni ningún otro tipo de discriminación por miedo a que pueda pasar algo peor. ¿Aún los animales discriminan? No lo sé, pero aunque fuera, el ser humano tiene un cerebro mucho más grande y complejo que los otros animales y una cultura mucho más variada (si bien no mejor). Además tiene una memoria histórica. ¿Y esto no le tendría que dar, por lo menos, la capacidad de no ver en un cualquier tipo de diferencia un motivo para discriminar?
Unos de los argumentos de discusión más fuertes era sobre los matrimonios homosexuales. Sobre todo porque esto implicaría la posibilidad de adoptar y habría la presunta necesidad para lxs niñxs de tener una figura masculina y una femenina durante sus crecimiento. La base de esto sería que si la natura se ha desarrollado de esta manera algún motivo habrá y entonces no hay que cambiarlo. Mi perspectiva es diferente. ¿Estamos segurxs que sea natural que una pareja compuesta por una hembra y un macho críe a lxs niñxs? ¿No es más bien un hecho cultural? Que sea una unión de gametos femeninos y masculinos a originar la vida es un hecho químico/físico común a todos los seres vivos, pero todos los animales crían a su prole de maneras muy diferentes. Muchas veces se limitan a dejar sus huevos fecundados, así como las plantas hacen con sus semillas. Muchas veces cría la prole la hembra, muy pocas veces lo hace el macho, muchas veces lo hace un grupo, como en el caso de los bonobos y de los chimpancés, los animales más parecidos a los seres humanos.
Si nos ponemos a buscar diferencias caemos siempre en la misma vorágine. En los seres humanos tradicionalmente (culturalmente) la pareja que le da vida a lxs niñxs cría la prole, pero ¿es siempre un bien? Hay muchos casos de padres y madres terribles. Seguramente habría casos de padres gays terribles o da madres lesbianas terribles o de madres y padres transexuales o intersexuales terribles. ¿Y? Además, tener dos madres lesbianas —por ejemplo— es algo diferente. Son bio-mujeres, sí, y probablemente durante parte de su vida vivieron como hembras criadas en una sociedad humana, pero desde cierto punto ya no. Son diferentes de mujeres heterosexuales en una pareja heterosexual. Son diferentes, pero son iguales, porque cada persona es una persona, diferente e igual con todas las variaciones posibles.

¡Si hay amor ya está!

El hecho de estar en un grupo de sólo hombres hizo evidente la falta de mujeres (o de personas de otros géneros, o sexos), dándonos una visión de la realidad bastante limitada. Sobre todo, para mi se vio como en muchos casos la separación dualística de la realidad en dos géneros bien distintos y sobre todo los atributos que estos géneros tienen sea algo “normal” para la mayoría de las personas; algo que no se pone en discusión. “Que pena que no haya mujeres, porque después de trabajar un masajito no está nada mal y nadie (ningún tío) quiere un masaje de un hombre”. “Nadie quiere dormir en la misma cama con otro hombre”. Chistes, risas, todo lo que haga falta para alejar cualquier tipo de pensamiento sobre contactos no violentos/cariñosos entre machos. Si hay un abrazo tiene que ser un abrazo viril y esto es lo máximo porque todo lo demás es de maricón y esto ni de coña, vamos!
Cuando empecé a escribir este post (y me paré para escribir este otro post sobre arquitectura y natura) leí un artículo muy interesante. Habla de la obsesión de los hombres para el sexo, visto como el único substituto que nuestra sociedad heteropatriarcal-capitalista le da a los hombres a cambio de cualquier otro tipo de manifestación afectiva. Voy a poner aquí unas traducciones de algunos de los conceptos más interesantes. Para quien quiera, aquí está el artículo (en inglés).
La sensualidad de estar vivos en nuestros cuerpos, conociendo nuestros sentidos y respirando respiros llenos ha sido descartada como un atributo no masculino. La sensualidad ha sido remplazada por la rutina. Aún si nos damos cuenta de los extremos, no sabemos percibir las sutilezas de los sentidos. El cariño y la ternura se han perdido por ser sutiles y lentas. Nacidos en cuerpos maravillosamente equipados por sentir, somos forzados a apagarnos y aceptar la insensibilidad. 
Esta descripción puede sonar bastante extrema. Pero es sólo una foto de lo que se considera normal —que damos por sentado— imponer a los chicos. No nos gusta creer que estamos en un estado tan extremo. Pensamos que todo lo que pudimos sobrepasar no tiene que haber sido tan malo. Si no nos parece, como hombres, que somos tan separados el uno del otro, de las mujeres, de lo que sentimos o de nuestros cuerpos, quizás sea porque hemos perdido la memoria de haber estado tan integrados, tan conectados. Para la mayoría de nosotros la alegría posible en nuestras vidas diarias está tan afuera del ámbito de nuestras experiencias que tenemos dificultad ya solo a imaginarla. Entonces consideren por un momento que la mayoría de los hombres han recibido alguna forma de este condicionamiento sistemático
Los chicos adolescentes están expuestos a un imperativo social de echar polvos para demonstrar su masculinidad mucho antes de saber lo que “echar un polvo” quiere decir.
El sexo era, y es, presentado como la ruta hacia la intimidad real, la proximidad completa, como el sitio donde está bien amar completamente, ser tiernos y vulnerables y al mismo tiempo estar a salvo, no sentirse tan profundamente solos. El sexo es uno de los lugares donde la sensualidad parece ser permitida, donde podemos ser dulces con nuestros mismos cuerpos y darnos el permiso de una pasión rebosante. El placer y el deseo, la vitalidad y la excitación, que al parecer dejamos atrás en algún sitio de que no nos podemos ni acordar, vuelve a ser imaginable. 
Esto es el motivo porque los hombres están tan obsesionados con el sexo. Cuando nacemos somos criaturas sensuales con una capacidad ilimitada para sentir y una propensión espontánea para conectar profundamente con todos los seres humanos. Pero luego somos sometidos a un condicionamiento continuado vuelto a reprimir la sensualidad, a ignorar nuestros cuerpos, a separarnos de nuestra proximidad natural con nuestros compañeros humanos. Todas las necesidades de los humanos se nos prometen luego por medio de sexo y sexualidad. Esta es una atracción efectiva porque la sexualidad puede ser de verdad una potente fuente de amor y placer, intimidad, sensualidad y belleza. Pero de ninguna manera el sexo puede satisfacer estas necesidades. Estas necesidades pueden ser satisfechas sólo después de una curación del condicionamiento masculino y después de cubrir cada área de nuestras vidas con relaciones y vitalidad.  

venerdì 20 dicembre 2013

Pretending to Be Green

While I was researching for my next post (coming soon) and writing it, my dad started watching a documentary about the project and the construction of the California Academy of Science, by renown Italian architect Renzo Piano. A visionary, revolutionary project, which took years in the thinking and in the making. There is a 800,000 litres water tank with water coming directly from the Pacific ocean through 5km of pipes. It houses the largest man made coral reef in the world, thousands of animals, from small fish to manta rays coming from all around the world. It also has two gigantic domes which house a planetary and a tropical rain forest. The forest can be seen at all its levels thanks to an incredible spiral shaped ramp built by roller-coaster makers.
Completed in 2009, the building covers 37,000 square metres, the project is very respectful with nature since most of the materials are reused and —between other things— it produces its own energy, with 60,000 solar panels. There is a very unconventionally shaped energy efficient green roof with many openings that help regulate the inside temperature. Also, it's got the greatest... and it can... and it holds... and it is the biggest... OK, you got it.

ENOUGH BULLSHIT!

When men (the fact that I'm not using 'human beings' is not casual) become so detached from Nature that they think they can use it according to their plans without an understanding of it the time of doom is close
Why human beings don't simply listen to Nature and learn from it instead of destroying it in order to make ecologically sound, nature friendly ginormous, AMAZING green building using millions of tons of materials, googolplexes of hours of human labor? Why don't we listen to our inner self?
Masanobu Fukuoka says “simply serve nature and all is well”. I agree.

We ARE Nature.

We serve nature, we serve ourselves.

sabato 7 dicembre 2013

From Two to Many - Parallelisms

Some days ago I wrote (in Spanish) a post on our society's obsession with pairs of opposite elements. It was also about the beauty of shades and open minds.  

The post was influenced by a book I was reading: The Ethical Slut. Two days later I started reading its last chapter and I was astonished to discover the similarities between my post and this final chapter. I'm going to copy it here. I'm sorry that only those who can read both Spanish and English can appreciate the parallelisms (even though the book is more centered on sex). Enjoy!



"From Two to Many

The world is very fond of twos: black and white, male and female, mind and body, good and bad. These pairs, we all learn, are opposed: there’s the right way and the wrong way, and our task is to do battle to defend the right and destroy the wrong. This kind of thinking dominates our courts, our politics, and our talk shows, with some crazy results: for instance, some people believe that anyone who enjoys sex outside of marriage, or a kind of marriage that’s different from theirs, must be attacking their marriage. Anything that is different must be opposed, must be the enemy.
When right and wrong are your only options, you may believe that you can’t love more than one person, or that you can’t love in different ways, or that you have a finite capacity for love—that “many” must somehow be opposed to “one,” or that your only options are in love and out of love, with no allowance for different degrees or kinds of love.
We would like to propose something different. Instead of these simpleminded either/or arguments, consider the possibility of seeing, and valuing, everything that there is, without viewing them as in opposition to one another. We think that if you can do this, you will discover that there are as many ways to be sexual as there are to be human, and all of them are valid. There are lots of ways to relate, to love, to express gender, to share sex, to form families, to be in the world, to be human … and none of them in any way reduces or invalidates any of the others.
When we open our mind to a world beyond opposites, we become able to see beyond unrealistic perfection and unachievable goals. We can free ourselves to be fully conscious of all the wonderful variety and diversity that there is right now in the world, right here, in the present, available to us.
Thus sluthood can become a path to transcendence, a freeing of the mind and spirit as well as the body, a way of being in the world that allows expanded awareness, spiritual growth, and love beyond imagining."

sabato 30 novembre 2013

La belleza de los matices

La sociedad en que vivimos nos hace creer que vivimos en un mundo binario, hecho de parejas de elementos opuestos. No quiero hablar de dualismo, de escuelas filosóficas ni mucho menos, pero la verdad es esta y más leo, pienso y hablo de esto —entre otras tuve unas discusiones muy bonitas con E. N.— más me doy cuenta que este tipo de división no tiene ningún sentido.
¿Por qué no tiene sentido? Porque la división del mundo en parejas de opuestos es una simplificación total. 
Este mismo ordenador en que estoy escribiendo funciona gracias a un código binario hecho de 1s y de 0s porque esto hace que sea más rápido que con una serie de 10 cifras —como en la numeración a que estamos más acostumbradxs— pero al mismo tiempo saca la poesía, la belleza y los matices. Sabemos de la esencialidad de un 1 y de la redondez de un 0, pero ¿como olvidar —por ejemplo— la belleza imperfecta de un 6 o la de un 3 todo hecho de curvas y de esquinas y rincones?
Y ¿por qué se quiere que creamos de vivir en un mundo binario? Porque se restringen las posibilidades y todo es más simple, más controlable, requiere menos esfuerzo si está dividido en parejas. Bueno-malo, infierno-paraíso, hombre-mujer, bonito-feo, heterosexual-homosexual, correcto-incorrecto, sí-no, normal-anormal, planta-animal, izquierda-derecha, solterx-casadx, me gusta-no me gusta, blanco-negro etc.
Hay alguien que piensa que el mundo está hecho de blancos y de negros, mientras muchxs otrxs lo ven como un ilimitado número de grises. Yo creo que el mundo está hecho de una infinita variedad de matices de color.


Si somos más de 7.000 millones de personas en el mundo, ¿como podemos pensar que solo haya dos casillas para cada aspecto de la vida? Dos maneras de ver las cosas. Dos maneras de ser. No es posible dividir las personas entre dos géneros —hombres y mujeres— porque hay una infinidad de otras opciones y cada persona es diferente, única. Pero así es y todo lo que sale de este dualismo es malo y se tiene que punir. Pero por ejemplo, ¿por qué aspecto está definido el sexo en los animales? ¿Gónadas? ¿Dimensiones de algunos órganos? ¿La presencia de determinadas estructuras físicas? Tener o no tener pelo, tener una nariz más o menos grade no nos define de ninguna manera específica, pero el sexo sí e influye de manera descomunal en la dirección que tomará nuestra vida. Además de niño o niña hay otras opciones, pero paralelamente a la voluntad de dividir todo en parejas de opuestos hay la voluntad de clasificar, de dar un nombre a todo lo que existe. Entonces en el caso en que la bebé no encaje nace el concepto de intersexualidad que es un poco como decir: "aquí va todo lo que no es macho o hembra". Mirando a los casos específicos es más fácil darse cuenta de la absurdidad de estas divisiones binarias: en el mundo animal llegaron a descubrir los sexos y las maneras de reproducirse de las estrellas de mar y todo este dualismo perdió totalmente de sentido.

Luego si nos alejamos de algo tan "claramente evidente" como los sexos y vamos a algo mucho más complexo como los géneros las cosas se "complican" muchísimo. En realidad nada es complicado, sino natural, pero nos gusta mucho ver como complicado lo que no encaja en nuestro mundo binario. 
"Los machos son hombres y las hembras son mujeres", dice el sabio. Ya pero ¿y las lesbianas? 
Bueno, es una minoría. 
¿Y los gays? ¿Y lxs bisexuales? ¿Y lxs transexuales? ¿Y lxs transvestidxs? ¿Y lxs queer? ¿transgender? ¿gender-queer? etc. etc., con miles de otras (inútiles) distinciones.

No. Como sociedad no podemos aceptar que existan pERsOnaS. Todo lo que es binario está bien, todo lo que no lo es no está bien. Y aun cuando vamos fuera de esta concepción binaria, muchxs sienten la necesidad de catalogar, dividir, encajar.
¿No es suficiente el respecto? Respecto. Lo que se necesita es el respecto entre las personas. Respecto de las diversidades de todos los tipos. 
Hay dinámicas que regulan las relaciones entre las personas, pero muchas veces estas dinámicas no funcionan y los resultados los conocemos bien: incomprensiones, peleas, luchas, guerras, violencia de género, escarnio y muchas más.
También a nivel de relaciones las cosas no son muy diferentes. Se puede tener una pareja (monogamia) o nada. Pero ¿cual es la diferencia entre dos amigxs y una pareja? El sexo. Y todxs sabemos que la monogamia (que implica la fidelidad) no siempre funciona. Sabemos que las personas emparejadas prefieren tener sexo con otra persona escondiéndolo a la persona que en teoría quieren más en el mundo. Escondiéndolo o intentando hacerlo. Todo es tan normalizado/normativo que aun pensar en la posibilidad que haya otras opciones además que "pareja monógama o nada" nos parece una absurdidad. Mientras todo vuelve a lo mismo. Si hay respecto todas las opciones son válidas. Respecto. ¿Lo queremos llamar de otra manera? Amor. Si te respecto te amo y si te amo te respecto y no importa quien eres o que haces. Te amo por lo que eres. ¿No sería más fácil?

mercoledì 30 ottobre 2013

Is Collaboration the Meaning of Life?

I've been wanting to write a new post for a very long while. I even started to write various posts about different things. I'll try to see if I can merge everything into a single entry coherently.

First of all, some background.
During one month in Catalonia (September 14th - October 16th) I re-encountered, met, got to know and —in general— loved a lot of people while living in 4 different places. 1) Mas Franch, 2) S. & H. F.'s place in Barcelona, Mas Franch, Barcelona, 3) Can Masdeu, Barcelona, 4) Kosturica and one last stop in Barcelona. I also visited other 2 projects (J. C.'s place + Can Manent), attended meetings of Permacultura Barcelona, the food forest group, and so on. Coming back to Italy I had the opportunity to meet old friends and to straighten some old scar tissue with L. B. in a very civilized way. The other night while writing this post I've also been listening to the EP of the Collective she's part of. My favourite song is n. 4, Calexico-ey and melancholic.
And now this new adventure: starting from last Monday I'm living for two months with two good friends in a very small, beautiful Italian town working in exchange for food and accommodation.

Very many things happened since I went to Barcelona in September —Permaculture Teachers' Training, European Permaculture Teachers' partnership, various bio constructions, meetings and parties and chats— and I had a lot of material for thought. During this whole period (in Catalonia) there was a lot of people care involved. I thought about our bodies and our “natural” shyness of showing them and how I overcame it. I already talked about how I find the prohibition for women to show their nipples
absolutely pointless and extremely sexist. It's true, maybe girls started to cover their tits to make them accessible only to those who would provide for them, thus having another arrow in their quiver since the control of sex was almost their only weapon, but society  and bigotry took over and even nowadays this prohibition stands. Same thing for the “necessity” women
have to shave or the idea that they should be skinny and Barbie-like. I saw many girls going against these prohibitions lately —at least in "safe" environments— and I couldn't be happier. Going back to myself, I never swam, sun bathed nor took a shower naked before, at least not in broad daylight, but it seemed just natural to do so, due to the relaxed circumstances and to the care everybody would take of everyone else. Care of people.

Thinking about bodies made me realize that our body —like any other organism— works because zillions of cells cooperate to make it work properly.
I also thought a lot about relationships —I've been reading The Ethical Slut, a very interesting book about “Polyamory, Open Relationships & Other Adventures”— and I realized that every successful and/or pleasurable activity is the result of a cooperation. Organisms. Relationships. Life. 

It's been happening in my life too. 










Since last April I've been living mostly in communities. Unlike most of the examples I heard about, these communities worked perfectly, especially when a good care of people was involved. The only problem I encountered in the relationships between all the people in these communities —between M. and various other people while I was at CMD— was handled beautifully by the rest of that community (which by the way was made up of two communities).
I feel that cooperation and the lack of competition is crucial towards any successful process. While staying at Valldaura —where I did an internship between last April and July— the first open discussion between us —the interns— and them —the organization— happened when N. D. —chief of the project— suggested that the 13 of us had to make a design for a vegetable garden and she would then decide which one was the best one. But she said that this wasn't a contest. I disagreed firmly and said it clearly and saw that almost all the other interns agreed with me. Why would anyone want to show that they're the best —thus creating frictions and a competitive environment— when they can share ideas with somebody else?
The most complex communities in nature work because there is a great cooperation between
Termite Colony
the various subjects which work together towards a common goal: the well being of the whole community. In bees, ants, termites, wasps colonies every single element is as important as the others and none of them is more important than the others. Not even the queen.
Her duty is to be laying eggs tirelessly, but if we talk about bees, if the queen dies the workers feed some of the larvae with royal jelly and create their new queen. These macro-communities work exactly like a single organism where the insects can be compared to cells and every one of them cooperate with the others to make the community work. As a matter of fact these types of colonies are commonly called "superorganisms". Apparently cooperation is the key to success and ants are a clear example. According to scientific studies there are around 10,000,000,000,000,000 individual ants alive on Earth at any given time, weighing together more than the entire human race!

Coming back to us human, the one single activity where people care is involved and a good cooperation of bodies, relationships and —why not?— life is needed for things to work well, is sex. But this would be another very long story. Maybe some other time. :)

venerdì 6 settembre 2013

Napule è na cartuline


Napule è na cartuline. Questa è stata un delle prime cose che mi ha detto I. F. al mio arrivo a casa sua, nel centro di Napoli. Una battuta ricorrente di Pippo Chennedy che avevo quasi scordato, ma che una vera napoletana non poteva aver dimenticato. Purtroppo non riesco a trovarla su YouTube...






'Vedi Napoli e poi muori' dicono. Io l'avevo sempre snobbata, sempre pensato che questa frase fosse un'esagerazione. Sempre preferito Roma, anche e soprattutto per la maggiore vicinanza e miglior connessione ferroviaria. Questo ha voluto dire che Napoli proprio non la conoscevo, avendola visitata un pomeriggio del 1997 dopo una mattinata a Pompei; era il giorno della morte di Lady D. L'unica altra “visita” è stata in macchina nel 2006 per andare al porto a prendere un traghetto verso la Tunisia. Punto. È la seconda grande città più vicina a Ceccano eppure non ricordavo praticamente niente. Poi ti capita la fortuna di conoscere due splendide ragazze durante un corso, che queste ti riaccompagnino a casa sulla via del ritorno verso Napoli e ti offrano di ospitarti per una piccola visita alla loro città. E finalmente cominci a conoscere un po' Napoli.
Mi viene subito in mente Barcellona, forse perché anche quello è un porto sul Mediterraneo o forse perché è lì che ho vissuto nell'ultimo periodo. Barcellona è una città ricca di cultura e di culture, di persone che vengono da ogni parte del mondo; una città con due culture e due lingue dominanti —la catalana e la spagnola— alle quali si aggiungono le culture di tutte le persone che ci vivono, indipendentemente da dove esse provengano. Barcellona è al centro del Mediterraneo, di un Mediterraneo fatto di lingue diverse e di persone che continuano a mischiarsi per creare una cultura sempre più ricca e moderna.

Napoli è il Mediterraneo.

È una città multiculturale perché piena di napoletanx, abitanti di questa città al centro del Mare Nostrum da sempre, quando di barcellonesi a Barcellona se ne trovano pochx. E le napoletane e i napoletani hanno una cultura così ricca e potente perché hanno avuto dominatori di ogni tipo, ma loro sono sempre restate le stesse persone con la loro maniera di fare le cose che può essere giusta o sbagliata, ma che è la loro. Con un'adattabilità esemplare, fuori dal comune, assolutamente da invidiare. O forse con una capacità di far adattare le altre persone a Napoli. Una città dove la cultura e la lingua napoletana sono state e sono capaci di inglobare tutto quello che viene e non per un'imposizione più o meno velata —come accade invece per il Melting Pot statunitense— quanto per un naturale processo di osmosi. A Barcellona si parla spagnolo, ma si parla anche —e soprattutto— catalano. Ma poi ho ascoltato l'inglese e l'italiano e il galiziano e il portoghese e il francese. E si ascoltano lingue alle quali non si sa dare un nome. A Napoli ci sono stato troppo poco e sicuramente succederà anche lì, ma a Napoli si parla napoletano. Spesso un italiano con un accento, una prosodia e alcuni termini napoletani —come ormai succede per tutte le lingue e i dialetti d'Italia— ma napoletano. Perché la cultura dà forma alla lingua e viene creata da questa.

Barcellona è una somma, Napoli è una fusione.

Napoli è una città capace di sorprenderti in ogni momento, per tutte le ragioni possibili e per molte che neanche ti aspettavi.

Visitarla con qualcuno che la conosce aiuta molto, chiaro, e dopo essere arrivato alla stazione di Napoli Centrale ho preso la metropolitana e raggiunto S. L. Con lei siamo andate a casa di I. F. dove ho lasciato il mio zaino perché la notte ho dormito lì e dopo una lunga chiacchierata in terrazza con una splendida vista sulla città ce ne siamo andate in giro. Anche loro sono rimaste sorprese dall'incredibile numero di persone che c'erano per essere un giovedì sera di tarda estate, ma a me l'incredibile vitalità di questo posto ha davvero sconvolto!
Pizza da Sorbillo
Dopo una pizza in una delle pizzerie più rinomate —e affollate— di Napoli (e una margherita a 3€) e una bellissima serata fatta di tanti incontri, di chiacchiere, di musica vecchiotta, di camminate e soprattutto di risate, ce ne siamo andate verso casa di I. F., poi a un certo punto mi hanno lasciato per andarsene verso casa sua S. L. e verso la casa del suo compagno I. F.
La mattina dopo ho seguito i consigli di S. L. e ho percorso tutta via Toledo fino ad arrivare al lungomare. Mi sono fermato in un bar per un caffè e una sfogliatella e qua e là per un occhiata ai monumenti (la galleria Umberto I, il Maschio Angioino, varie piazze, etc.)
Piazza Plebiscito
prima di arrivare al lungomare che ho percorso fino a arrivare al bel Castel dell'Ovo che ho visitato a lungo. Tornato indietro mi sono incontrato con S. L. per pranzo. Abbiamo fatto
Castel dell'Ovo
una bella camminata per il centro mangiando qui e là e cominciando a vedere in maniera più approfondita cose che non ti aspetti. “Per vedere Napoli devi imparare a spiare” mi dice S. L. dopo averle riferito di aver visto un uomo anziano mangiare pasta nel suo negozio di presepi nella centralissima Via San Gregorio Armeno, la strada dei presepi. Poco dopo S. L. è dovuta tornare al lavoro e mi ha lasciato alla visita dei quartieri spagnoli. La vera Napoli, secondo colei che ha incontrato e codificato La vera Italia in provincia di Viterbo.


I quartieri spagnoli sono davvero La vera Napoli. Sono come Napoli³. Ogni angolo, ogni persona, ogni suono è una nuova sorpresa. Vicoletti incantevoli, ma non incantevoli-per-turisti, bei graffiti un po' ovunque a fare da contraltare alle svariate edicole votive, piazzette, scooter sovraffollati che sfrecciano nelle lunghe strade parallele, gruppi di immigrati dal subcontinente indiano che giocano a carte per strada allo stesso modo di gruppi di lavoratori che lo fanno dentro l'officina di un falegname. Ma non ci sono solo gli uomini in giro e la vita si fa in strada: un'anziana signora seduta al centro della strada con i suoi bellissimi gatti argentati, una donna con fisico non-da-modella che incurante si affaccia da un balcone in reggiseno per chiacchierare con altre persone nella piazza sottostante, venditrici e venditori di gelati, un anziano seduto davanti alla porta di casa sua —rialzata di vari gradini dalla strada— che guarda il mondo scorrergli davanti. E poi donne che pranzano nel loro bar e ragazze e ragazzi e bambine e bambini che chiacchierano, si muovono, vivono!

A presto Napoli! Non ho in programma di morire, per cui alla prossima puntata.