Visualizzazione post con etichetta relationships. Mostra tutti i post
Visualizzazione post con etichetta relationships. Mostra tutti i post

sabato 28 dicembre 2013

¿Condicionamiento masculino?

Durante los últimos meses he vivido en un mundo de hombres. Después de unos primeros días donde había un porcentaje muy bajo de mujeres, llegó un periodo de masculinidad absoluta. 5 hombres antes, después 3 o 2 tíos durante mucho tiempo. Cuando eramos 5 B.B. repetía que estar tanto tiempo sólo con hombres era una situación muy difícil de repetirse y si, esto puede ser un experimento sociológico interesante durante un tiempito.
Durante este periodo pasé mucho rato charlando e intercambiando opiniones con los otros chicos, sobre todo con L.B.. Nuestras discusiones siempre rotaban alrededor de temas como relaciones interpersonales, discriminaciones (de género, más que todo), sexualidad. Nuestras posiciones sobre estos conceptos son bien diferentes entre ellas y las charlas subieron de intensidad desde el primer intercambio de opiniones el verano pasado, hasta un largo viaje de coche hace pocos días. 
¿Qué es cultural y qué es natural? ¿Tenemos que confiar en la evolución (cultural) y aceptar también lo que no nos gusta como las discriminaciones o las injusticias? ¿Solo porque, de faltar estas, no se seguiría el curso natural de las cosas y podrían pasar cosas aún peores?
Yo —por ejemplo— no creo que la discriminación de las mujeres sea un hecho natural, sino más bien cultural. ¿Es algo que existe desde hace muchísimo tiempo? Esto no quiere decir que tengamos que aceptarla. No. No tenemos que aceptar ni esto ni ningún otro tipo de discriminación por miedo a que pueda pasar algo peor. ¿Aún los animales discriminan? No lo sé, pero aunque fuera, el ser humano tiene un cerebro mucho más grande y complejo que los otros animales y una cultura mucho más variada (si bien no mejor). Además tiene una memoria histórica. ¿Y esto no le tendría que dar, por lo menos, la capacidad de no ver en un cualquier tipo de diferencia un motivo para discriminar?
Unos de los argumentos de discusión más fuertes era sobre los matrimonios homosexuales. Sobre todo porque esto implicaría la posibilidad de adoptar y habría la presunta necesidad para lxs niñxs de tener una figura masculina y una femenina durante sus crecimiento. La base de esto sería que si la natura se ha desarrollado de esta manera algún motivo habrá y entonces no hay que cambiarlo. Mi perspectiva es diferente. ¿Estamos segurxs que sea natural que una pareja compuesta por una hembra y un macho críe a lxs niñxs? ¿No es más bien un hecho cultural? Que sea una unión de gametos femeninos y masculinos a originar la vida es un hecho químico/físico común a todos los seres vivos, pero todos los animales crían a su prole de maneras muy diferentes. Muchas veces se limitan a dejar sus huevos fecundados, así como las plantas hacen con sus semillas. Muchas veces cría la prole la hembra, muy pocas veces lo hace el macho, muchas veces lo hace un grupo, como en el caso de los bonobos y de los chimpancés, los animales más parecidos a los seres humanos.
Si nos ponemos a buscar diferencias caemos siempre en la misma vorágine. En los seres humanos tradicionalmente (culturalmente) la pareja que le da vida a lxs niñxs cría la prole, pero ¿es siempre un bien? Hay muchos casos de padres y madres terribles. Seguramente habría casos de padres gays terribles o da madres lesbianas terribles o de madres y padres transexuales o intersexuales terribles. ¿Y? Además, tener dos madres lesbianas —por ejemplo— es algo diferente. Son bio-mujeres, sí, y probablemente durante parte de su vida vivieron como hembras criadas en una sociedad humana, pero desde cierto punto ya no. Son diferentes de mujeres heterosexuales en una pareja heterosexual. Son diferentes, pero son iguales, porque cada persona es una persona, diferente e igual con todas las variaciones posibles.

¡Si hay amor ya está!

El hecho de estar en un grupo de sólo hombres hizo evidente la falta de mujeres (o de personas de otros géneros, o sexos), dándonos una visión de la realidad bastante limitada. Sobre todo, para mi se vio como en muchos casos la separación dualística de la realidad en dos géneros bien distintos y sobre todo los atributos que estos géneros tienen sea algo “normal” para la mayoría de las personas; algo que no se pone en discusión. “Que pena que no haya mujeres, porque después de trabajar un masajito no está nada mal y nadie (ningún tío) quiere un masaje de un hombre”. “Nadie quiere dormir en la misma cama con otro hombre”. Chistes, risas, todo lo que haga falta para alejar cualquier tipo de pensamiento sobre contactos no violentos/cariñosos entre machos. Si hay un abrazo tiene que ser un abrazo viril y esto es lo máximo porque todo lo demás es de maricón y esto ni de coña, vamos!
Cuando empecé a escribir este post (y me paré para escribir este otro post sobre arquitectura y natura) leí un artículo muy interesante. Habla de la obsesión de los hombres para el sexo, visto como el único substituto que nuestra sociedad heteropatriarcal-capitalista le da a los hombres a cambio de cualquier otro tipo de manifestación afectiva. Voy a poner aquí unas traducciones de algunos de los conceptos más interesantes. Para quien quiera, aquí está el artículo (en inglés).
La sensualidad de estar vivos en nuestros cuerpos, conociendo nuestros sentidos y respirando respiros llenos ha sido descartada como un atributo no masculino. La sensualidad ha sido remplazada por la rutina. Aún si nos damos cuenta de los extremos, no sabemos percibir las sutilezas de los sentidos. El cariño y la ternura se han perdido por ser sutiles y lentas. Nacidos en cuerpos maravillosamente equipados por sentir, somos forzados a apagarnos y aceptar la insensibilidad. 
Esta descripción puede sonar bastante extrema. Pero es sólo una foto de lo que se considera normal —que damos por sentado— imponer a los chicos. No nos gusta creer que estamos en un estado tan extremo. Pensamos que todo lo que pudimos sobrepasar no tiene que haber sido tan malo. Si no nos parece, como hombres, que somos tan separados el uno del otro, de las mujeres, de lo que sentimos o de nuestros cuerpos, quizás sea porque hemos perdido la memoria de haber estado tan integrados, tan conectados. Para la mayoría de nosotros la alegría posible en nuestras vidas diarias está tan afuera del ámbito de nuestras experiencias que tenemos dificultad ya solo a imaginarla. Entonces consideren por un momento que la mayoría de los hombres han recibido alguna forma de este condicionamiento sistemático
Los chicos adolescentes están expuestos a un imperativo social de echar polvos para demonstrar su masculinidad mucho antes de saber lo que “echar un polvo” quiere decir.
El sexo era, y es, presentado como la ruta hacia la intimidad real, la proximidad completa, como el sitio donde está bien amar completamente, ser tiernos y vulnerables y al mismo tiempo estar a salvo, no sentirse tan profundamente solos. El sexo es uno de los lugares donde la sensualidad parece ser permitida, donde podemos ser dulces con nuestros mismos cuerpos y darnos el permiso de una pasión rebosante. El placer y el deseo, la vitalidad y la excitación, que al parecer dejamos atrás en algún sitio de que no nos podemos ni acordar, vuelve a ser imaginable. 
Esto es el motivo porque los hombres están tan obsesionados con el sexo. Cuando nacemos somos criaturas sensuales con una capacidad ilimitada para sentir y una propensión espontánea para conectar profundamente con todos los seres humanos. Pero luego somos sometidos a un condicionamiento continuado vuelto a reprimir la sensualidad, a ignorar nuestros cuerpos, a separarnos de nuestra proximidad natural con nuestros compañeros humanos. Todas las necesidades de los humanos se nos prometen luego por medio de sexo y sexualidad. Esta es una atracción efectiva porque la sexualidad puede ser de verdad una potente fuente de amor y placer, intimidad, sensualidad y belleza. Pero de ninguna manera el sexo puede satisfacer estas necesidades. Estas necesidades pueden ser satisfechas sólo después de una curación del condicionamiento masculino y después de cubrir cada área de nuestras vidas con relaciones y vitalidad.  

sabato 7 dicembre 2013

From Two to Many - Parallelisms

Some days ago I wrote (in Spanish) a post on our society's obsession with pairs of opposite elements. It was also about the beauty of shades and open minds.  

The post was influenced by a book I was reading: The Ethical Slut. Two days later I started reading its last chapter and I was astonished to discover the similarities between my post and this final chapter. I'm going to copy it here. I'm sorry that only those who can read both Spanish and English can appreciate the parallelisms (even though the book is more centered on sex). Enjoy!



"From Two to Many

The world is very fond of twos: black and white, male and female, mind and body, good and bad. These pairs, we all learn, are opposed: there’s the right way and the wrong way, and our task is to do battle to defend the right and destroy the wrong. This kind of thinking dominates our courts, our politics, and our talk shows, with some crazy results: for instance, some people believe that anyone who enjoys sex outside of marriage, or a kind of marriage that’s different from theirs, must be attacking their marriage. Anything that is different must be opposed, must be the enemy.
When right and wrong are your only options, you may believe that you can’t love more than one person, or that you can’t love in different ways, or that you have a finite capacity for love—that “many” must somehow be opposed to “one,” or that your only options are in love and out of love, with no allowance for different degrees or kinds of love.
We would like to propose something different. Instead of these simpleminded either/or arguments, consider the possibility of seeing, and valuing, everything that there is, without viewing them as in opposition to one another. We think that if you can do this, you will discover that there are as many ways to be sexual as there are to be human, and all of them are valid. There are lots of ways to relate, to love, to express gender, to share sex, to form families, to be in the world, to be human … and none of them in any way reduces or invalidates any of the others.
When we open our mind to a world beyond opposites, we become able to see beyond unrealistic perfection and unachievable goals. We can free ourselves to be fully conscious of all the wonderful variety and diversity that there is right now in the world, right here, in the present, available to us.
Thus sluthood can become a path to transcendence, a freeing of the mind and spirit as well as the body, a way of being in the world that allows expanded awareness, spiritual growth, and love beyond imagining."

sabato 30 novembre 2013

La belleza de los matices

La sociedad en que vivimos nos hace creer que vivimos en un mundo binario, hecho de parejas de elementos opuestos. No quiero hablar de dualismo, de escuelas filosóficas ni mucho menos, pero la verdad es esta y más leo, pienso y hablo de esto —entre otras tuve unas discusiones muy bonitas con E. N.— más me doy cuenta que este tipo de división no tiene ningún sentido.
¿Por qué no tiene sentido? Porque la división del mundo en parejas de opuestos es una simplificación total. 
Este mismo ordenador en que estoy escribiendo funciona gracias a un código binario hecho de 1s y de 0s porque esto hace que sea más rápido que con una serie de 10 cifras —como en la numeración a que estamos más acostumbradxs— pero al mismo tiempo saca la poesía, la belleza y los matices. Sabemos de la esencialidad de un 1 y de la redondez de un 0, pero ¿como olvidar —por ejemplo— la belleza imperfecta de un 6 o la de un 3 todo hecho de curvas y de esquinas y rincones?
Y ¿por qué se quiere que creamos de vivir en un mundo binario? Porque se restringen las posibilidades y todo es más simple, más controlable, requiere menos esfuerzo si está dividido en parejas. Bueno-malo, infierno-paraíso, hombre-mujer, bonito-feo, heterosexual-homosexual, correcto-incorrecto, sí-no, normal-anormal, planta-animal, izquierda-derecha, solterx-casadx, me gusta-no me gusta, blanco-negro etc.
Hay alguien que piensa que el mundo está hecho de blancos y de negros, mientras muchxs otrxs lo ven como un ilimitado número de grises. Yo creo que el mundo está hecho de una infinita variedad de matices de color.


Si somos más de 7.000 millones de personas en el mundo, ¿como podemos pensar que solo haya dos casillas para cada aspecto de la vida? Dos maneras de ver las cosas. Dos maneras de ser. No es posible dividir las personas entre dos géneros —hombres y mujeres— porque hay una infinidad de otras opciones y cada persona es diferente, única. Pero así es y todo lo que sale de este dualismo es malo y se tiene que punir. Pero por ejemplo, ¿por qué aspecto está definido el sexo en los animales? ¿Gónadas? ¿Dimensiones de algunos órganos? ¿La presencia de determinadas estructuras físicas? Tener o no tener pelo, tener una nariz más o menos grade no nos define de ninguna manera específica, pero el sexo sí e influye de manera descomunal en la dirección que tomará nuestra vida. Además de niño o niña hay otras opciones, pero paralelamente a la voluntad de dividir todo en parejas de opuestos hay la voluntad de clasificar, de dar un nombre a todo lo que existe. Entonces en el caso en que la bebé no encaje nace el concepto de intersexualidad que es un poco como decir: "aquí va todo lo que no es macho o hembra". Mirando a los casos específicos es más fácil darse cuenta de la absurdidad de estas divisiones binarias: en el mundo animal llegaron a descubrir los sexos y las maneras de reproducirse de las estrellas de mar y todo este dualismo perdió totalmente de sentido.

Luego si nos alejamos de algo tan "claramente evidente" como los sexos y vamos a algo mucho más complexo como los géneros las cosas se "complican" muchísimo. En realidad nada es complicado, sino natural, pero nos gusta mucho ver como complicado lo que no encaja en nuestro mundo binario. 
"Los machos son hombres y las hembras son mujeres", dice el sabio. Ya pero ¿y las lesbianas? 
Bueno, es una minoría. 
¿Y los gays? ¿Y lxs bisexuales? ¿Y lxs transexuales? ¿Y lxs transvestidxs? ¿Y lxs queer? ¿transgender? ¿gender-queer? etc. etc., con miles de otras (inútiles) distinciones.

No. Como sociedad no podemos aceptar que existan pERsOnaS. Todo lo que es binario está bien, todo lo que no lo es no está bien. Y aun cuando vamos fuera de esta concepción binaria, muchxs sienten la necesidad de catalogar, dividir, encajar.
¿No es suficiente el respecto? Respecto. Lo que se necesita es el respecto entre las personas. Respecto de las diversidades de todos los tipos. 
Hay dinámicas que regulan las relaciones entre las personas, pero muchas veces estas dinámicas no funcionan y los resultados los conocemos bien: incomprensiones, peleas, luchas, guerras, violencia de género, escarnio y muchas más.
También a nivel de relaciones las cosas no son muy diferentes. Se puede tener una pareja (monogamia) o nada. Pero ¿cual es la diferencia entre dos amigxs y una pareja? El sexo. Y todxs sabemos que la monogamia (que implica la fidelidad) no siempre funciona. Sabemos que las personas emparejadas prefieren tener sexo con otra persona escondiéndolo a la persona que en teoría quieren más en el mundo. Escondiéndolo o intentando hacerlo. Todo es tan normalizado/normativo que aun pensar en la posibilidad que haya otras opciones además que "pareja monógama o nada" nos parece una absurdidad. Mientras todo vuelve a lo mismo. Si hay respecto todas las opciones son válidas. Respecto. ¿Lo queremos llamar de otra manera? Amor. Si te respecto te amo y si te amo te respecto y no importa quien eres o que haces. Te amo por lo que eres. ¿No sería más fácil?